El año pasabo me sentía un verdadero fracaso en cuanto a metas realizadas…
Antes que nada déjame darte un poco de perspectiva. Navidad Panamá es un proyecto que nació hace 7 años ya. Cuando lo inicie fue todo un reto. Para ser franca el primer año nos fuimos en números rojos y con un repertorio de lecciones. Algo que teníamos que sacar de esa experiencia, no?
En fin después de 5 sesiones (sí eso fue todo ese año) mi novio quedo secando mis lagrimas de derrota con sus palabras de aliento diciéndome “Estoy orgulloso de ti, este será el primero de muchos años. El próximo año lo harás mejor pero este es tu primer éxito. ¡Te felicito! Ya iniciaste.” El solo recordar ese momento hace que se agüen los ojos porque ahora puedo ver lo ciertas que eran sus palabras.
Conforme han pasado los años he visto con asombro cómo poco a poco hemos mejorado. Claro siempre hay tropiezos y siempre hay obstáculos. Pero cada vez parece más fácil superarlos.
En 2021 termine el año super ORGULLOSA y feliz de lo que habíamos logrado esa temporada. ¡Cumplí 28 años! Me sentía emocionada y lista para de una vez empezar a planificar todo para la temporada 2022. Pero luego la vida decidió sorprenderme. ¡Me convertí en mamá!
Debo aceptarlo fue un embarazo duro, los hay peores seguramente, pero para mí fue un proceso bastante agobiante. No me malinterpretes siempre estuve feliz a la espera de mi princesa pero las idas al hospital y malestares del embarazos fueron duros.
Pensé mucho si debía hacer no las fotos de Navidad ese año. Rafaella estaba supuesta a nacer el 14 de octubre de 2022. En pleno inicio de mi temporada de sesiones navideñas. Yo estaba decidida en dar a luz naturalmente, así que en mi mente decía que la recuperación sería rápida y podría regresar al ruedo fácilmente. En este punto muchas mamás leyendo esto seguramente se estarán riendo de mi ingenuidad. Pero entonces yo no lo sabía y decidida igual lance mis sesiones de Navidad con ánimos de cumplir sobre todo con aquellas familias que consecutivamente me apoyaban y acompañaban año tras año.
Rafaella nació a las 7:29 p.m. el 28 de septiembre de 2022 mediante CESAREA programada. Yo estaba decidida igual, sabiendo que apenas tenía un mes para recuperarme hice todo lo que me decían y aconsejaban los profesionales de la salud. Levantante camina, compresas frías… etc. Pero amigos nada te prepara para ser mamá de una bebita. Y sobre todo nada te prepara para ese primer mes.
Sin embargo a un mes de mi cesárea con ayuda de Vite (el papá de Rafaella, mi novio de hace muchísimos años), mi mamá, Alma (mi compañera y super asistente), Lorena (una amiga), Emmanuel “Memo” (otro asistente) y Pali (un trabajador) logre montar el escenario que quería. ¡Estaba emocionadísima!
Me cayó como balde agua fría cuando empece a recibir cancelaciones de algunos clientes porque pues… no estaban tan emocionados como yo de los escenarios del año pasado. ¿Qué podemos hacer? No todos tenemos los mismos gustos. Sin embargo escuchándolos a todos decidí repensar el escenario y lo modificamos todo en un día para que las siguientes sesiones estuvieran más a gusto. Todo esto mientras cuidaba de una bebita de escasos 2 meses de vida que sólo tomaba pecho materno.
A dos días de terminar la temporada me vi obligada a encarar un nuevo reto. La muchacha que había contratado para ayudarme con Rafaella me abandono sin previo aviso. Yo con bebé, 2 días más de sesiones, ordeñandome y con muchas sesiones aún pendientes por editar hice todo lo que pude para no hundirme en la desesperación que me empujaba a una segura depresión. En este punto quiero agradecer ENORMEMENTE a todas las familias y personas que al enterarse de esto fueron increíblemente pacientes y empáticos con mi situación.
Sólo tenía ayuda por las tardes-noches ya que el papá de Rafaella (Vite) trabaja todo el día. Así que tuve que aprender a vivir con pocas horas de sueño y atender a mi hija mientras editaba cada foto en una carrera por terminar antes de navidad.
En la víspera de navidad aún no había terminado. Me tome un momento para tomarme unas fotos con mi familia frente al árbol de navidad en casa de unos amigos y me retire para seguir editando en una habitación con mi hija dormida a un lado del escritorio. Derrame lagrimas de emoción cuando finalmente envíe las últimas fotos y asi mismo caí rendida con mi hija en brazos hasta la mañana siguiente.
Aunque fue toda una aventura y hoy es una historia de mi vida como mamá y profesional; en la mañana de navidad me obsequie una promesa. Dentro de lo posible más nunca quería verme en esa situación. Por eso decidí que este año 2023 la organización, preventa, venta, diseño, atención y todo debía ser 10000000% mejor que cada año. Y es una promesa que pretendo cumplirme.
